lunes, 18 de mayo de 2009
¡Cuidado con el agua!
Por: Viviana Avila
Con el verano a la vuelta de la esquina, tanto pequeños como adultos pensamos en un tiempo de descanso frente al mar, un lago o una piscina para refrescarnos.
Pero lamentablemente, no todo es diversión. Durante esta época del año se presentan la mayor cantidad de accidentes en el agua. Estadísticas indican que cerca de 1,000 menores de edad mueren anualmente ahogados en Estados Unidos, 350 de ellos tienen menos de 5 años.
Por eso, es importante que a la hora de disfrutar del agua, en playas, piscinas, lagos o parques acuáticos, siga las indicaciones y tome todas las medidas necesarias, para prevenir tragedias.
Tenga en cuenta que en las orillas del mar, los lagos y ríos, el nivel del agua no es tan profundo, pero que éstos tienen corrientes fuertes que pueden arrastrar a los niños. La Comisión Nacional del Consumidor de Estados Unidos advierte que bastan sólo 5 minutos y 2 pulgadas de agua para que un menor muera ahogado.
Los menores no deben descuidarse ni por un segundo, aún cuando hayan tomado cursos de natación. Sobre este aspecto, La Cruz Roja Americana indica que hay que mantener a los menores a una distancia en la que se les pueda observar, si un adulto no puede identificar desde cierta distancia a los menores que están nadando o los confunde con otros niños, algo está mal. La supervisión constante es la mejor fuente de prevención.
El otro error que generalmente se comete es pensar que un flotador puede salvar la vida de un pequeño. Muchos padres piensan que los mejores son aquellos que se colocan en brazos y piernas. Pero lo cierto es que este tipo de flotadores pueden resbalarse o reventarse. Por eso los chalecos salvavidas son los más aconsejables.
Recuerde que todas las medidas preventivas serán poco efectivas sino van acompañadas de un proceso educativo adecuado, debemos hacer que nuestros hijos comprendan el porque de estas medidas, así como los riesgos reales que supone no tomarlas.
Si nos limitamos a prohibirles determinadas actitudes sin que se entiendan las razones, es muy probable que decidan saltarse las normas, por eso es indispensable explicarles con detenimiento los riesgos a los que se pueden exponer sino obedecen las instrucciones.
No permita que los juegos de los menores en el agua impliquen empujones, saltos ó carreras alrededor de piscinas y no olvide que como adulto debe ser el más responsable en el agua: por ningún motivo lleve bebidas alcohólicas, ni trate de salvar a alguien si no sabe nadar, y nunca deje a los menores solos. ¡Ahora sí, a disfrutar del agua!
Amigo lector de La Columna Vertebral, para acceder a servicios en su comunidad llame a La Línea de Ayuda de La Red Hispana al 1-800-473-3003.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario